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Muchos aún creen que trabajar desde cualquier rincón del mundo es un mito, pero la verdad es que con la tecnología actual y una buena conexión Wi-Fi, trabajar a distancia es más real que nunca. La pandemia obligó a cientos de personas a trabajar desde casa, y muchas de ellas descubrieron que les gustaba más que la rutina de ir a la oficina todos los días. Incluso algunos jefes se dieron cuenta de los beneficios: menos gastos en oficinas y empleados más felices gracias a la flexibilidad horaria.
Para muchos, ser un nómada digital es un sueño hecho realidad. Este estilo de vida puede cambiar tu perspectiva y tu vida para siempre. Ganas libertades como elegir tu lugar de trabajo, tus compañeros de escritorio (o no tenerlos), gestionar tus horarios, y ahorras en transporte, entre muchas otras ventajas. ¡Te explicamos más en este artículo, y seguro que te darán ganas de intentarlo pronto!.
Lo mejor de trabajar a distancia es la flexibilidad. Esto mejora tu calidad de vida, ya que tener opciones es sinónimo de libertad. Aunque debes cumplir con tus responsabilidades, puedes decidir cómo y dónde hacerlo. Puedes trabajar desde casa, en un café o en un espacio de Coworking, conectando con otros nómadas digitales. ¿Día soleado? No te quedes encerrado, trabaja desde una terraza. ¿Te apetece una tarta y un buen café? Llévate tu portátil a tu cafetería favorita. ¡Puedes variar según tu estado de ánimo y planes del día!
Algunos teletrabajadores también pueden elegir sus horarios. Si no eres madrugador, trabaja por la tarde. Adapta tu horario a tus preferencias, saca a pasear a tu perro, haz una pausa para comer con un amigo y vuelve al trabajo sin perder tiempo en desplazamientos. ¿Quieres una sesión de yoga en tu día? Hazla sin problema. Son pequeñas libertades que aumentan significativamente tu bienestar.
Si tienes la suerte de llevar un estilo de vida nómada digital, aprovéchalo al máximo. Aunque tienes muchas opciones, necesitas ser productivo y mantener un buen nivel de autocontrol. La otra cara de la libertad es la disciplina. Tienes que establecer tus propias normas para no dejarte llevar por las distracciones y cumplir con tu trabajo. Todo es cuestión de equilibrio. Tanto si eres freelancer como emprendedor o salariado, debes organizarte bien para no perder el rumbo.
¿Quieres saber más sobre cómo aumentar tu productividad trabajando a distancia? Descubre nuestras estrategias en el artículo: «7 propuestas para dominar el arte de la productividad».
Muchos buscan un trabajo remoto para poder viajar más. Los nómadas digitales surgieron de este deseo. Si quieres aprovechar al máximo este estilo de vida, viajar es una de las mejores cosas que puedes hacer. Puedes quedarte en un lugar el tiempo que desees, evitando las temporadas más caras y concurridas. ¿Viajar así es un sueño, verdad?
Viajar solo puede ser una experiencia totalmente nueva y desafiante. Te ayuda a desarrollarte personalmente, ganar confianza y superar tus límites. Conoces gente nueva, aprendes idiomas y descubres culturas. Tu forma de pensar cambia por completo. Además, no tienes que comprometerte con actividades que no te apetecen; puedes hacer lo que realmente quieres. Viajar en solitario potencia el autoconocimiento.
Pero no significa estar solo y aislado. Muchas veces el objetivo es ampliar tu red de contactos y crear nuevas relaciones. Un coliving puede ser ideal para esto, con actividades y excursiones en grupo, cursos, talleres y mucho más. Nuestra plataforma SpainForNomads te brinda todo lo que necesitas: alojamiento, compañeros de viaje, información, inspiración y actividades.
Viajar mientras trabajas no siempre es sencillo. Aquí algunos consejos para facilitarte la vida: lleva suficientes dispositivos electrónicos, adaptadores y cargadores. Invierte en una buena mochila y empaca lo menos posible; No necesitas tanto como crees. ¿Quieres más tips para planificar tu maleta para viajes largos? Lee nuestro artículo: «Consejos para facilitar los viajes».
No tendrás más opción que reducir tus pertenencias, y, de hecho, viajando esto sucede casi de manera natural. Pronto te darás cuenta de que es una de las mejores consecuencias de este estilo de vida. No solo reduces tus gastos, sino que también cambias tus valores. El planeta y tu salud financiera y mental te lo agradecerán.
Tener menos cosas aumenta la calidad de vida: te aporta más libertad, más orden, más tiempo y más dinero para ti. La clave está en invertir en calidad para que los productos duren más. Aunque el precio inicial sea mayor, a largo plazo ahorrarás al reducir las compras frecuentes y disminuirás la cantidad de residuos. Esto contribuye a reducir las actividades industriales más contaminantes, como la fabricación textil. Además, te permite conocerte mejor: con menos distracciones, es más fácil descubrir lo que realmente te apasiona.
Supongo que ahora tienes ganas de probar un estilo de vida a distancia. Tienes un montón de opciones para empezar. Descubre algunas aquí: «Cómo iniciarse en un trabajo remoto».
